domingo, 11 de abril de 2010

NOVELA COLECTIVA: TRABAJO PARA LOS ESTUDIANTES DE 5° A MATUTINO

Estimados estudiantes: envío a ustedes un saludo y una felicitación por la preocupación expresada acerca de que esta tarea no estuvo puesta en el blog durante las vacaciones. La razón es que quise que disfrutaran su descanso y vinieran con energías renovadas para emprenderla. A partir de mañana (12 de abril de 2010) ustedes seguirán el orden que habíamos propuesto, resolviendo el trabajo (un estudiante por día). No se preocupen por poner título a sus capítulos, háganlo sólo numerándolos como en el ejemplo. El título de la novela, lo acordaremos al final. A continuación, el primer capítulo de la novela.
Capítulo 1
José Collado llegó el sábado temprano al círculo literario al que pertenecía desde cuatro años antes. Se le había ocurrido la idea de proponer a sus amigos un concurso interno de novela policíaca, con el propósito de tener un pretexto para incursionar en ese género literario tan socorrido en los últimos tiempos.
Ningún otro miembro del círculo aparecía aún. Faltaban al menos treinta minutos para la hora que desde siempre se tenía acordada para las reuniones; así que José conectó la cafetera, puso agua en el depósito de cristal, añadió café en el papel filtro, y se sentó a esperar.
Mientras el agua entraba en ebullición y empezaba a teñirse del arómatico brebaje, Collado -como lo conocían sus compañeros del Círculo- sacó del maletín un puñado de hojas para máquina escritas a mano y comenzó a leer el borrador de un cuento que había estado trabajando la noche anterior. Era el quinto de una serie de veinte que se había propuesto crear para su siguiente libro de historias cursis.
La lectura era lenta, cuidadosa. Los ojos pasaban como caricia por cada una de las palabras, y el cerebro iba armando el código y descifrando el mensaje. El rostro del autor alternaba gestos de emociones diversas: un momento una sonrisa; otro, una mueca angustiada; uno más, un rasgo de preocupación... en tres ocasiones manifestó decepción e, irremediablemente, levantó la pluma de tinta roja que portaba en la mano izquierda, y -como si se tratase de un bisturí- la dejó caer sobre las oraciones y los párrafos que le habían parecido inconvenientes, ocasionándoles tachaduras extensas. El color de la tinta aparecía en el papel como herida quirúrgica, como amputación, como cercenamiento, como sangre fresca, como incontenible hemorragia. Deshacer partes del mensaje eran eso: una mutilación, un filicidio doloroso, cruel y necesario.
Estaba convencido de que ser escritor no es una cuestión de inspiración, sino de oficio. Es decir, que el escritor se hace mediante el trabajo constante, la práctica diaria. Y una obra se construye mediante la escritura, la lectura, la corrección, la reescritura, la relectura y la recorrección... todas las veces que sea necesario, hasta que el texto dice exactamente lo que su creador quiere que diga.
El agua de la cafetera empezó a burbujear y el vapor se extendió por la enorme sala de la casa impregnando las paredes, las sillas, el librero y los libros; y saturando el olfato de Collado, quien terminó de rayar el texto y empezaba ya a escribir notas al pie y al margen de cada una de las hojas, en sustitución de los fragmentos eliminados del texto inicial.
El cuento iba cobrando forma. Grosso modo, trataba de una bella muchacha enamorada de la vida y de un joven que conoció en los primeros días de la universidad y con el cual sostenía una relación sólida y feliz. Pero un día, ella empezó a sentir que algo crecía en su abdomen. Tuvo náusea y vómito; perdió el apetito, se fue poniendo pálida y perdiendo peso. Acudió a consulta médica y tras una serie de interrogatorios, de exámenes físicos y de pruebas de laboratorio, el médico le dijo que los resultados eran positivos, y que debía comunicárselos a sus padres de inmediato. Ella prefirió callar. No quería angustiar a sus padres con una noticia semejante. Así que, mientras perduraban las molestias, aumentaba la palidez y seguía perdiendo peso, el bulto del abdomen seguía siempre creciendo. Se puso ropa floja para que no se notara. Y nadie lo notó. Los padres lo supieron en el último momento, cuando era imposible de ocultar, y cuando ya no fue necesario seguir fingiendo. Esa madrugada le empezaron unos dolores horribles, y antes de media mañana el cáncer la venció para siempre.
Con algo de satisfacción por el argumento de la historia, Collado dejó las hojas en la silla y se levantó para servirse una taza de café. Lo acostumbraba cargado y con muy poco azúcar. Aunque era un individuo joven, de algunos treinta y cinco años, tenía una implacable herencia familiar que lo predisponía fuertemente a la diabetes. Y, si a algo le tenía miedo, era a las enfermedades. Más a las crónicas, porque matan lentamente y hacen estragos irreversibles. Entre todas, la que más pavor le ocasionaba era, precisamente, la diabetes; porque no podía borrarse de la mente la imagen de su abuelo que empezó perdiendo los dedos de los pies; luego los pies; más tarde las piernas; posteriormente los muslos, la vista, la función de los riñones, la sangre, la vida... Por ello se cuidaba de no consumir demasiada glucosa y no sabía si era por su precauciones o porque su cuerpo así estaba diseñado, se mantenía preocuntemente delgado, para el gusto de cuantos lo rodeaban.
Afortunamente, a pesar de su aspecto famélico, las únicas enfermedades que recordaba haber padecido eran las de la infancia: varicela y sarampión. Después de eso, un par de catarros, un periodo de diarrea de tres días y nada más.
El primer sorbo se acompañó del ruido de la puerta y el timbre del reloj. Eran las ocho. Los contertulios habían empezado a llegar y muy pronto aquello estaría lleno de gente que iba a leer sus obras y a criticar las de los otros, en un sano ejercicio de poner a prueba la creación y la creatividad.
-¿Con qué nos sorprenderás ahora? -preguntó Antonio.
-Traje un cuento breve. Pero quiero proponerles un reto más grande: pasar del cuento, a la novela.
-¿Hay alguna propuesta concreta?
-Quiero que exploremos la literatura "negra". Ninguno de nosotros ha escrito jamás un cuento en ese estilo. Tampoco hemos escrito novela. El reto es, pues, escribir una novela negra. Haremos un concurso entre nosotros y votaremos por la mejor versión. Una vez elegida la obra, las demás serán destruidas para que no haya textos de tema semejante. ¿De acuerdo?
Todos los presentes aceptaron. Acordaron un plazo de tres meses para completar los textos y traerlos al círculo para ser leídos y juzgados.
-Las pautas generales -dijo Collado- son las siguientes: una mujer casada tiene un amante y se embaraza de él. Para evitar que el marido la toque y llegue a conocer esa verdad, inventa estar enferma. Convence al marido de que siente malestares intensos y hasta cierto repudio de su compañía. Éste se conforma y no cuestiona a su mujer. Ella constriñe el abdomen cuanto puede y llegado el momento acude a que la operen y extraigan al feto. El feto muere y ella se deshace del cuerpo. De algún modo la policía se entera y cuando empiezan las investigaciones, el marido conoce la verdad que desde el principio la mujer le ocultaba.
-Amigos -agregó-: a ustedes y a mí corresponde idear la historia. La más interesante, la más inverosímil, la menos predecible, la más ingeniosa, será la ganadora. El dinero del círculo, será empleado para la publicación. Señores: ¡A escribir!
Amigos estudiantes: a ustedes corresponde -en el área de comentarios- añadir el resto de los capítulos de esta novela colectiva. Sean imaginativos y démosle la mejor forma a este trabajo. Les aseguro que el experimento les va a gustar mucho. Al agregar en comentarios su capítulo, escriban inmediatamente abajo su nombre, pero marquen el comentario como anónimo, para que el programa no les ponga límites que les imposibilite cumplir con esta tarea. Hasta pronto.

8 comentarios:

  1. CAPITULO 2
    En un abrir y cerrar de ojos la sala quedo completamente en silencio, Collado comenzó a escribir en sus hojas de papel... Escribía un párrafo y borraba. Escribía otro y volvía a borrar. Desesperado comenzó a voltear con sus otros compañeros, y como si fuera una tortura para el, sus compañeros tenían la vista clavada en su trabajo. Collado comenzó desesperado a golpear el lápiz contra la meza. Trataba de que una buena idea se le viniera a la mente pero todo era inútil. Comenzaba a escribir el clásico “era una vez” pero era muy infantil, luego volvía a escribir “en un lugar muy lejano” pero era demasiado bobo. Su frente comenzó a llenarse de sudor, las gotas le recorrían todo el rostro hasta caer en la meza cerca de la hoja de papel, su camiseta se comenzó a empapar debajo de las mangas, en la espalda, y en el pecho. Nuevamente intento escribir algo en la hoja de papel, pero igualmente fue tan inútil que de la desesperación azoto las manos contra la meza e hizo que el café que unos momentos antes estaba disfrutando, se convirtiera en un doloroso ardor que cubriera parte de su camiseta y su pantalón. –aaaah! –Collado dio un grito desesperado de dolor-. Todos sus compañeros voltearon con una mirada de enojo y preocupación, pero nadie le tomo mucha importancia y nuevamente agacharon su mirada para seguir cada quien en su trabajo. Collado se paro de su lugar y se dirigió al baño, donde tomo un pedazo de tela que se encontraba cerca del lavamanos y comenzó a tratar de retirar la mancha que el café le había pintado. Pero era inútil, lo que el café unos minutos antes le allá parecido un verdadero esquicites, ahora no lo quería ni voltear a ver. Retiro la mancha lo mas que pudo y comenzó a echarse agua en la cara. –Debo pensar algo y rápido, de no ser así seré la completa vergüenza del círculo literario, y hasta me podrían correr. –Pensó detenidamente-. Collado salió del baño y se dirigió a su lugar. Con una mirada de amabilidad, uno de sus compañeros lo volteo a ver. –Collado no te presiones mucho, solo usa tu imaginación como lo hiciste cuando estabas creando las novelas que ahora tienes publicadas, ¿Qué paso con el viejo collado que era muy fantasioso y audaz? Vamos no te des por vencido, solo inventa otra de tus buenas historias y gánanos a todos. –Animo su compañero-. –Tienes razón solo estoy un poco presionado por los resultados de este concurso, gracias amigo. –Contesto Collado con la mirada de tranquilidad. Nuevamente comenzó a escribir, y esta vez parecía ser algo bueno e interesante. Pasaron diez minutos y Collado seguía con el lápiz pegado al papel escribiendo. Las gotas de sudor nuevamente le cubrieron el rostro, pero esta vez no eran de desesperación si no de trabajo y cansancio. Tomo las hojas y comenzó a leerlas en la mente, una sonrisa le pinto el rostro y nuevamente bajo las hojas y siguió escribiendo, pero esta vez con mas rapidez, mientras mas escribía mas entusiasmo le daba a Collado. Su novela estaba cobrando forma. Cuando Collado levantaba las hojas para leerlas, su rostro se pintaba de una mirada que decía “mi novela le ganara a todas las novelas de mis compañeros”. Paso una hora mas y Collado soltó el Lápiz y levanto las hojas dándole una gran satisfacción por el trabajo que había hecho. Por ultímame vez para verificar que su trabajo estuviera bien, comenzó a leerlo en su mente, y la novela decía algo asi.

    OSCAR OCTAVIO CHAVEZ SANTANA

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  2. capitulo 3

    “En una ciudad muy pequeña muy retirada a la civilización, un pequeño grupo social fue seleccionado en una de las perores juegos macabros, sangrientos y asquerosos no física mente si no mental pues “eso” así le decía atacaba en los sueños.

    Estas personas no sabían lo que les esperaba, nadie sabía que, como, por qué, que hice……

    Empieza el día normalmente como casi toda persona empieza, en acepciones algunas. Como Ashley una persona muy bella y muy guapa, ella empieza su día así en cuanto se levanta de la cama se dirige directamente a el baño, hace sus necesidades, se baña, se lava los dientes, sale del baño a vestirse en su habitación escoge su ropa se la pone se maquilla guarda sus cosas y se dirige a la universidad.

    El camino que guía hacia la escuela no es como todo camino clásico el cual ves mucha gente, carros, camionetas, bicicletas etc.… este camino no es muy bello y menos con el adorno que contiene, en la banqueta como en la calle hay muchas hojas clásico otoño estadounidense en pedazos hay casas y en pedazos no, Ashley como la mayoría de las personas se aterrorizaba de ese camino y como no tenia en que moverse le tocaba irse caminando, miraba de un lado a otro y de repente que tropieza con una rama y cae bruscamente tirando sus útiles al suelo y desparramándolos como un vaso con agua cayendo al suelo, rápidamente se levanta riéndose con dolor y miedo, trata de recoger sus cosas lo mas pronto posible y retirarse de ese lugar, en cuanto termina de recoger sus útiles que con tanto sacrificio levanto por lo mismo de esas hojas tenidas de color marrón y anaranjado las cuales le estorbaban mucho y no lograba de ver clara mente, pues todo como un principio empieza también termina, la chica se levanta abrasa bien sus cuadernos y se echa a correr por que el tiempo se le estaba agotando ya se le estaba haciendo tarde y sentía que alguien la acosaba.

    Pronto llega a la universidad un poco retrasada pero en los minutos de tolerancia, llega a su clase que le tocaba abre las puertas y se sienta en su escritorio saca sus útiles y presta atención. Termina las horas de clases salen, todos se dirigen a sus casas e igual ella y su mejor amiga Mercedes. Llegan a la casa de Ashley comen y platican, Ashley le platica a mercedes lo que le había pasado mercedes grito de la risa y se hecho unas carcajadas diciendo y el trabajo que nos dejo el profesor, como un rallo se paran las dos chicas dirigiéndose acial escritorio en el cual estaba la computadora con medio trabajo hecho las chicas terminan el trabajo y cuando termina se pusieron a ver videos y fotos en youtube. com como en esa pagina es entrelazada con otros videos, ellas abrieron uno el cual prestaron toda la atención del mundo y vieron un joven contándoles lo que le había pasado en sus sueños, dice el joven que se despierta sintiéndose el mismo de repente oye un ruido y mira una sombra con la forma de su padre, delgado y alto esa sombra se va acercando y la sorpresa es que no es su padre sino otra persona la cual era horripilante esta persona rara se va acercando y el joven se va retirando, pronto el joven se topa con la pared y la persona se acerca y lo rasguña, por reacción del cuerpo pones sus manos de repente el joven despierta de su sueño y mira sus manos la sorpresa el que las manos están cortadas.

    Las chicas se miran la una a la otra con mucho y cierran ese programa, guardan su trabajo lo imprimen y se acuestan a dormir recordando que solo eso ataca en los sueños.”

    El joven escritor cuando termino de leer un pequeña parte de la novela se puso erecto y coloco la mano en la barbilla diciéndose a si mismo estará bien esta parte?, la continuo?, o elaboro otra?.

    cristian lopez lares

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  3. capitulo 3

    En un día cualquiera, clásico de todos los otoños del mundo, hojas pálidas y cenizas de color marrón.

    Unos jóvenes camino hacia la universidad se toparon, cada quien estaba pensando en sus problemas (tengo mucha tarea, no tengo dinero, etc.) clásico estudiante que quiere superarse a si mismo inesperadamente zazz chocan los dos, como si fuera un tremendo golpe de carro, se miran uno al otro se quedan callados y mirándose a los ojos y soltaron una carcajada, se para Mauricio lo más rápido posible riéndose y dirigiéndose para con Selena le estira la mano, la joven la toma y se para, uno al otro se mira y dicen:

    -oye disculpa por el choque no me imagine que nos toparíamos.
    -Selena dice, no hay problemas me hacía falta un golpe estaba muy concentrada con la escuela mis tareas y todo eso.
    -Mauricio dice, no te creas no eras la única yo también estaba muy distraído. Disculpa ni nos presentamos verdad, bueno yo soy Mauricio.
    -y yo soy Selena.
    -Órale Selena, disculpa no te había visto en la universidad eres nueva.
    -Selena dijo, si apenas entre aquí hice mi cabio.
    Las dos personas se dirigían para la escuela platicando, llegaron a la escuela y cada quien retomo el camino para su clase.

    Paso la primera hora la segunda y la tercera hasta que se llegó la hora de la salida, Mauricio se dirigía hacia la salida de repente Selena le brinca en la espalda y le dice te atrape. Así empieza la historia por unas personas que se encontraron camino para la escuela. Paso el tiempo y los chicos se miraban frecuente mente y así paso salían iban al cine, a comer e incluso a hacer la tarea.

    Los dos jóvenes se enamoraron, paso el tiempo y las horas de clase, en un fin de semana Mauricio le hablo por teléfono a Selena, Selena contesto y dijo:
    -hola mi amor puedes venir a la escuela de nuevo te estoy esperando ocupo que me ayudes con algo.
    Mauricio como es de las personas que se preocupa de los demás fue camino hacia la escuela, ya era tarde estaba obscureciendo la escuela ya estaba cerrada, Mauricio se quedó parado sostuvo el barandal y dijo será que me jugo una broma o que, voy a enviarle un mensaje, le envió el mensaje y Selena se lo respondió diciendo, estoy en la clase de gimnasia puedes venir por favor te estoy esperando con ansia. Mauricio leyó el mensaje y se rio se brinco y se metio a la escuela miro la clase de gimnasia y corrió abrió la puerta y vio a Selena sentada en una alfombra así paso, platicaron tomaron y paso lo que iba a pasar tuvieron sexo.

    pasaron las semanas, la joven notaba que el abdomen le crecía lentamente, casi no iba a la escuela, un día la joven se izó la prueba de embarazo los resultados no le fueron satisfactorios, sentía nauseas, mareos no le quedaba ningún remedio y tuvo que ir con el doctor hay la mantenía en revisión, no le contaba nada al doctor que lo que estaba planeando, el doctor le recetaba pastillas para el buen desarrolle del feto lógicamente no las tomaba, las tiraba al bote de la basura, paso el tiempo el abdomen le iba creciendo como ya se le notaba, sumía el estómago y en ocasiones se ponía faja para reducir la hinchazón del estómago de todos modos se le notaba.

    Su pretexto era tengo cólicos, me duele la cabeza, etc. hasta que se llegó las cita que con tantas ansias esperaba.

    cristian lopez lares

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  4. Jose Collado estaba muy desepcionado se encontraba en un trance terrible sin saber que hacer porque nunca antes le habia pasado algo similar a lo que le estaba ocurriendo siempre fue el mejor en su trabajo, consiguiendo lo que se proponia no sabia como solucionar ese problema se sentia impotente hacia la situacion en la que se encontraba, leia ,leia y volvia a leer pero nada le agradaba se agarraba la cabeza , sudaban sus manos ,estaba muy agotado porque ya eran las 11 de la noche y aun esta ba en la oficina escribiendo pero nada era de su agrado haci que decidio borrar la historia de Selena y Mauricio ,despues borro la de Ashley, sus ojos los sentia muy pesados de tanto cansancio y sentia un dolor muy fuerte que no lo dejaba levantarse de su silla ,era su espalda pues habia estado mucho tiempo sentado .
    Collado apago el monitor, su lampara de escritorio y se despidio del guardia de seguridad y se dirigio camimo a su casa , las calles eran muy escalofriantes ya era muy tarde y todo estaba oscuro y solo.
    Jose Collado al llegar a su casa busco sus llaves donde siempre las guardaba ,debajo del tapete al verlas recordo que se habia ido en su auto a su trabajo.
    Carla Rubi Anguiano Naranjo

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  5. Collado deside dejar que su auto se quede en el estacionamiento en el que lo dejo porque ya no tenia ganas de caminar devuelta por el.
    habra la puerta de su casa deja su maletin en el sofa , camina hacia su recamara y se sienta en su cama y se quita sus zapatos se soba un rato sus pies y se recuesta sobre su casa sin saber mas de el sin pensarlo se queda totalmente dormido al siguiente dia despierta muy asusta di porque de tanto canasancio no habia escuchado el despertador y ya era muy tarde .

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  6. Ese día Collado despertó muy cansado y comenzó a arreglarse para el trabajo, si durmió hasta tarde pero no fue un sueño muy reparador, con todo el cansancio que traía de pensar toda la noche y además la decepción de que de nada había servido, no sus cuentos no le habían servido y además no sabia que le estaba pasando el mismo puso las reglas del cuento, y no las estaba siguiendo, le dolía mucho la cabeza todo el tiempo y se sentía muy fatigado, ya no creia estar tan joven como algunos pensaban.

    En ese momento Collado se dio cuenta que era domingo Dios!! que le pasaba ya ni siquiera sabia en que día vivía, si definitivamente estaba muy cansado le encantaba su oficio y aunque siempre había creído que las grandes mentes nunca necesitaban descansar ahora se estaba dando cuenta que no era así, que el tiempo siempre cobra las mal pasadas.

    Se dirigió a la cocina a medio vestir hasta para terminar esto se sentía cansado, tomo un pan tostado y un vaso de leche y con esto se dirigió a su patio trasero donde tenia una pequeña banca con una mesa de madera ya muy vieja donde le gustaba sentarse a trabajar, porque aunque creía que ser escritor no era de inspiración si creía que había lugares donde te sentías mas cómodo y trabajabas mejor.

    Comenzó como el creía que era una buena idea, anotando los hechos que van a transcurrir sobre la obra para despues desarrollarlos, pero no termino de hacer ni lo primero cuando se quedo meditando sobre su vida y que era un hombre divorciado y solo, se repetía a si mismo que había sido su propia elección dejar a su mujer y como no después de tremendo engaño!!, creía que todos sus males se debían a lo que "esa" había hecho y no a su exceso de trabajo.
    si "esa" ya que ni siquiera merecía que le llamara por su nombre, es mas le decía a la gente que le preguntaba que ya ni siquiera lo recordaba.
    Claro que lo recordaba y como no iba a ser asi si fue una de las experiencias mas feas de su vida;
    -si creo que por esto no puedo concentrarme en escribir la historia si es algo tan parecido a lo que a mi me sucedió- dijo golpeando la mesa y tirando la leche sobre el poco trabajo que llevaba- ya me sentía listo pero creo que no es así.

    Se sentó resignado sobre su vieja banca que era la favorita de su ex-esposa y comenzó a recordar lo que algunos años atrás había sucedido en ese mismo lugar donde ahora se encontraba.



    Alma Delfina Ramírez Robles.

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  7. para irce a su trabajo,se baño se cambio se peino y tomo su maletin que abia dejado sobre el sofa se percino y pidio a dios que lo ayudara con un mejor dia que el dia anterior, cuando camina hacia su cochera,jose se dio cuanta de que abia dejado su carro en el estacionamiento de su trabajo y se dio cuenta de que habia sido un error al no aberce debuelto por su carro en la noche anterior,por quedarce profundamente dormido se hizo tarde irce a su trabajo pero era un poco retirado asi que agarro uno de eso camioncitos urbanos y llego a su trabajo y se dio cuanta de que su coche estaba bien pero de todas maneras llego un poco tarde a pesar de que abia tomado un autobus,pero durante el transcurso hacia su trabajo miro a mas personas que le icieron ayudarle con su novela.
    el cuando llego a su trabajo le dijo al guardia buenos dias y su compañero de trabajo le contesto buenos dias, disculpe señor collado lo e notado un poco raro ¿le pasa algo? ¿en que lo pueda ayudar? usted digame y si yo puedo ayudarlo lo ayudo con gusto sabe que ami no se me da mucho lo de escritor pero si puedo ayudarlo confie en mi.El señor collado contesta muchas gracias compañero se que me a sido un poco dificil escribir la historia de Selena,Mauricio y Ashley.pero como lo dije un escritor se hace mediante el trabajo constante, la práctica diaria. Y una obra se construye mediante la escritura, la lectura, la corrección, la reescritura, la relectura y la recorrección.bueno compañero seguire con mi trabajo ya bengo un poco tarde y no me gustaria demorarme mas tiempo.
    gollado pao a su area de trabajo y como acostumbraba a pesar del miedo a la deabetis tomo una tasa de cafe como le gustaba tomarlo y en lo que su boca saboreaba el cafe amargo por su mente pasaba lo que el iva a escribir, despues de tomar su tasa de cafe tomo una pluma una hoja y enpeso a escribir la historia de Selena y Mauricio

    ENRIQUE GONZALEZ PELAYO

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  8. Selena era una joven muy guapa de un carácter serio era una joven con toda una vida por delante estudiaba y a veces trabajaba en una tienda de abarrotes, en sus tiempos libres ella solía ir por ay a caminar cada tarde después de hacer la tarea, en ese lugar de donde ella e veces solía ir a caminar un día por la tarde se encontró con un joven llamado Mauricio en la saludo y ella lo voltio a ver con una mirada cualquiera con su rostro triste nada mas le contesto con un solo lema “mmm” buenas tardes y ella como si nada siguió su camino ella ya jamás volvió a voltear en eso el joven se sorprendió porque una muchacha tan joven y tan hermosa tenía un rostro tan triste y tan preocupante bueno dijo sabe todos tenemos problemas a la mejor esa muchacha está pasando por uno de esos problemas cualquieras después de que él se hiso esa pregunta partió y como si nada también él siguió su camino al llegar a su casa Mauricio se metió a bañar y se cambio tomo un descanso en su sofá y quedando un apocó dormido por el gran silencio que en esa habitación se en encontraba de repente le vino a la mente la imagen de aquella muchacha que él había mirado sobre el camino en que él se encontraba caminando y en eso abrió los ojos y se pregunto a el mismo porque esa imagen en mi mente una leve sonrisa y dijo aaaaaaayy tonterías mías pero en eso dijo que raro nunca la había visto y por ay era tan hermosa sus ojos tan hermosos para que ella haiga estado tan sola por ay bueno tan triste pero que me preocupa si ella no es nada mía en fin olvídalo se dijo él solo y cerró los ojos y se quedo dormido en su sofá, al otro día por la mañana Selena se despertó se metió a bañar y se tomo un café después se preparo para regresar a clases después de unas largas vacaciones, cuando llego a la escuela lo primero que se encontró ay fue nuevos compañeros y de ver tantos rostros en uno de esos se le hizo algo raro seria por que ya lo conocía pero no sabia quien era pero de que lo conocía ella sabia que si lo conocía pero no lo tomo tanto en cuenta y se retiro de ay poco después en el salón de clases ella vio que de reojo alguien la miraba de repente ella salió al baño y después de un buen rato tomo aire para volver a entra a clases cuando de repente con un gran suspiro elevado voltio y vio a ese joven que tanta atención le tomaba en clases y el se e acerco y le dijo “hola” como estas me presento ante ti por que veo que nos a tocado una gran suerte que nos allá tocado en el mismo salón que padre no crees a mi me da mucho gusto por se que vamos a poder ser muy buenos amigos bueno yo me llamo Mauricio y tu claro si se puede saber con un gran silencio ella se loa pensó un rato y después de que el se le quedo mirando por fin dijo si esta bien yo me llamo Selena mucho gusto en conocerte sabes perdón que no siga platicando con tigo pero tengo que entrar a clases con permiso “espera dijo Mauricio” ¡espera no te vallas por favor¡ necesito saber mas de ti quiero saber quiero conocerte y ella contesto si sabrás mas de mi pero con el tiempo lo sabrás bay y se dio la vuelta y se fue el culminado por ver y haber estado con ella un buen rato dijo jamás había conocido a alguien como ella me canta tengo muchas ganas de volver a estar platicando con ella me gustaría ser algo mas que su amigo por que ay algo de ella que me llama mucho la atención creo que apenas la conozco y ya quiero que sea algo mas que solo una compañera amiga que me estará pasando con esa chica bueno dejare de tomarle tanta atención a esos ojos que me llaman mucho la atención con ella dejare quien el tiempo descubra y el sea el que diga todo mejor y así pasaron los días hasta que un día por la mañana…

    Ana Alejandra Carrillo Vazquez

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